A mis niños
y niñas de Fomento de la Lectura, les late la Paz dentro de la cajita del
corazón.
Este mes de
Enero, lo dedicamos a dejarnos envolver por lecturas que nos abrigaron de la
desesperanza y la falta de concordia en un mundo que va perdiendo la humanidad
a jirones.
Trabajamos
la Paz sobre un total de nueve lecturas que merecen un rinconcito especial en
nuestra Biblioteca y en nuestro corazón.
El regalo de
tío Oso (nos lo contó de manera divertida Beatriz Montero en su canal de
Youtube: https://www.youtube.com/watch?v=GIYzM13ar8c
Se trata de un precioso cuento coreano sobre el regalo especial de la
amistad.
¿A qué sabe
la luna? , un texto de Michael Grejniec publicado por Kalandraka. Se trata de
un tierno cuento sobre unos animalitos que suman sus esfuerzos para intentar
probar el sabor de la luna. Una luna juguetona, que se acerca y se aleja a su
antojo y que al final, no sabemos si queriendo o sin querer, se deja probar por
el pequeño ratoncito que ofrece a todos un mordisquito del pedacito que ha
conseguido arrancar a la luna. ¿A que cuando compartimos, todo nos sabe más rico?
Donde late
el corazón, una historia de Satoe Tone editada por Planeta, que nos cuenta las
aventuras de unos tiernos gatitos, a los que nosotros bautizamos como Negro y
Blanca, en honor a su color. Negro quiere conseguir todas las luces que se
reflejan en el agua para impresionar a Blanca. Tiene que aceptar que es
imposible. Blanca lo hace mirar hacia arriba. Allí están las luces que tan
esquivas se mostraban en el agua. Todos y cada uno de nosotros tenemos una o
varias estrellas en el cielo, sólo hay que saber mirar con los ojos del corazón
y dejar que nos conecten unos a otros con sus hilos invisibles.
¡Yo, pimero!
Escrito por Helen Lester editado por Planeta. Nos cuenta la historia de
Pinkerton, un cerdito arrogante y prepotente que quiere ser el primero en todo,
sin importarle a quien se lleve por delante. Hasta que un día conoce a un
pequeño y extraño ser con una verruga en la nariz y pelos en los pies que
consigue reconducir su actitud. Pinkerton comprende que no ser el primero
siempre tampoco es el fin del mundo y que respetar el espacio del otro es fundamental
para una convivencia pacífica y plena.
La
bibliotecaria de Basora escrita por Jeanette Winter en la editorial Juventud. Nos
cuenta la historia real de Alia Muhammad Baker, bibliotecaria de la ciudad de
Basora durante la ocupación de Irak. Su biblioteca era la casa a la que todos
iban para pasar ratos agradables en compañía de los libros. Alia, con ayuda de
algunos amigos y vecinos, salvó sus
queridos libros de la destrucción de la guerra. Las bibliotecas y los libros
son un puente que nos une a la vida y la amistad , por muy difíciles que sean
los tiempos que nos toque vivir. Cuentan que en el Corán se refleja que lo
primero que Alá le dijo a Mahoma fue: “Lee”.
La pequeña
intolerancia escrito por Mar Pavón y editado por Tramuntana. Esa pequeña intolerancia,
del tamaño de una mosca, persigue a toda costa, instalarnos en el odio, cosa
que es demasiado fácil en el mundo en el que vivimos. Por eso es necesario
conocer las pequeñas intolerancias que nos asedian cada día, para evitar caer
en la negrura de una vida que no respeta a quienes tenemos al lado. Los niños
decían que esto no era un cuento, que era la vida real.
De la pluma
de Susana Gómez Redondo y de la editorial Takatuka recibimos El día que Saída
llegó para buscar con ella las palabras mágicas que nos permitieran entendernos
aun siendo diferentes. Decidimos con ella y con su amiga tirar por la borda
para siempre la palabra FRONTERA.
Imagine, un
cuento publicado por la editorial Flanboyant llenos de imágenes deliciosas que
ilustran con detalle las palabras escritas por John Lenon en la canción del
mismo nombre. Decidimos que, definitivamente, tenemos que seguir soñando sin
descanso un mundo en PAZ.
También hubo
tiempo para nuestro Taller de Escritura Creativa. Esta vez, mis grumetas
aprendices de escritoras escribieron unos acrósticos que son una maravilla a
partir de la expresión “LA PAZ”.
Silvia
Mocholí Utrera escribió:
La vida es como un libro y el nuestro
lo leería mil veces.
Ama a alguien que te de seguridad y
confianza.
Para aliviar todo el dolor que me
embarga, te necesito a ti.
Amor, has sido mi prioridad y siempre
lo serás, aunque me duela, te tengo que soltar.
Zarparía contigo lejos de aquí, en un
barco que nadie pueda seguir.
Y Laura
Cordero Núñez:
La niña vestida de rosa que escribe
cuentos en prosa.
Aviones de colores llenan el cielo con
mil sensaciones.
Palo palito, convierte la Paz en un
tesorito.
Almendras, ¡hummmm!, cómo me gustaría
tener algunas muestras.
Zapatillas con tambores despiertan
nuestros corazones.
Ójala estas
historias prendan en el corazón de cada uno de nosotros y seamos capaces de
tener la valentía para defender nuestro derecho indiscutible a vivir en PAZ.
Nosotros, por si llegaran momentos de desfallecimiento, nos guardamos en los
bolsillos semillitas de PAZ, que sigue enviándonos con su recuerdo y ejemplo
nuestra “Sembradora de Agua”, Wangari Maathai.
Mª José Vergel Vega