domingo, 13 de diciembre de 2015

Artesanos de Torrejoncillo estuvieron en Belén


Siempre hemos oido hablar a nuestros mayores de la importancia que tuvo nuestro pueblo gracias a las manos de sus artesanos: pañeros, alfareros, orives, zapateros, hojalateros, cesteros, danzadores, bordadoras, sastres...y a las manos de gente humilde que trabajaba el campo, que vendía las hortalizas , el pescado en la plaza, los dulces hechos con esmero y que hacían las bocas agua...
Se me ocurrió una tarde de lluvia, sentada tras la ventana, que debía hacer unos versos para que mis niños valoraran lo que un día fue nuestro pueblo, y lo que podrá ser en un futuro, si nos apoyamos y confiamos los unos en los otros. Son versos sencillos, de poeta inexperta, pero que para mí tienen un sabor muy especial.

Contaba una vieja crónica
que en Belén se presentaron
cargados con lindas cosas,
un puñado de artesanos.

Dicen los libros de Historia,
que siempre son acertados,
que esos  que allí estuvieron
eran torrejoncillanos.

Estas bonitas alforjas
dejaré junto al Portal;
tengo por nombre Ezequiel
y trabajo en un telar.
Hasta aquí traje esta manta
urdida con mucho afán,
os la quedo aquí tendida,
para algo servirá.

Traigo una oronda tinaja
fabricada con mis manos;
tengo por nombre Victoria,
mi vida, el torno y el barro.
Como el vientre de la tierra
guarda sombra en sus entrañas,
así el cántaro que traigo
guardará muy fresca el agua.

Para alumbrar tu camino
he traído este farol,
está hecho de hojalata
y alumbra que es un primor.
Andrés el hojalatero
ha llegado hasta Belén,
y esta típica aceitera
vengo a traerte también.

Una linda Cruz de Pebah
he tallado en mi taller,
la traigo para María
si se la quiere poner.
Ser orfebre es mi oficio,
los metales yo trabajo;
Hugo soy de nacimiento,
¡me encanta estar en el tajo!

jueves, 3 de diciembre de 2015

Cuentos llegan de Biblonia




De la misma Biblonia nos llegó este cuento en verso que pusieron en escena los más pequeñitos. En clase nos encanta poner en verso, con alguna que otra licencia, los cuentos clásicos. Os dejo este de Los tres cerditos . ¡Que lo disfrutéis!


Cuentos llegan de Biblonia
que es el país de los libros,
los manda un duende pequeño
muy amigo de los niños.

Biblonio se llama el duende,
en los cuentos vive escondido.
la seño dice que es invisible,
por eso no lo hemos visto.

Al país de Biblonia
también llega la navidad,
Biblonio manda esta historia
que te vamos a contar.

Éranse que se eran
tres lindos animalitos,
que vivían en el bosque:
te hablo de los tres cerditos.
  

Como ya estaban muy grandes,
su mamá les dejó dicho:
¡una casa tenéis que haceros,
que ya estáis creciditos!

El mediano que era un vago,
mucho, mucho protestó:
¡tú te haces la casita,
porque te lo mando yo!

Como la casa era de paja,
mucho no le aguantó;
en cuanto vino el lobo
de un soplido la derribó.

Llorando desconsolado,
al mayor de sus hermanos,
le contó con mucha pena
aquello que había pasado.

¡Déjame que aquí me quede
que llega la navidad,
y en tu casita de madera
el lobo no ha de entrar!

Pasa, pasa, mi hermanito
que comienza a refrescar,
y galletitas con leche
nos vamos a merendar.